Ahorrar energía es fácil siempre y cuando se cambian algunos hábitos. Tras el aumento del precio de la luz, uno de los objetivos de los hogares es reducir el coste de la factura de la luz. Para reducir el consumo en un hogar es importante mantenerse constante ante las novedades que comentamos a continuación:
– Dispositivos eficientes
Los electrodomésticos consumen mucha energía en una casa. El uso de electrodomésticos de clase energética A puede reducir significativamente las facturas de electricidad. La inversión en dispositivos de alta eficiencia es mayor, pero compensa porque se ahorran costes de electricidad.
– Aislamiento en la casa.
Elimina las fugas de calor y frío de la casa, revisa paredes y ventanas para ahorrar dinero y reducir el consumo. Instalar las ventanas correctas puede ahorrarle hasta un 70% en sus facturas.
– Consultar el precio pactado con la compañía eléctrica.
La factura de la luz consta de una parte variable y una parte fija. La parte fija es el stream suscrito. Si tienes más electricidad de la que tu hogar realmente necesita, tus facturas aumentarán. La parte variable, en cambio, se relaciona con el consumo y el precio pactado con la empresa. Es importante acordar la tarifa eléctrica que mejor se adapte a tus necesidades.
– Apague los dispositivos que están en modo de espera
Los aparatos conectados a la electricidad generan costes aunque no los utilicemos. Utilice una regleta para desconectar fácilmente los dispositivos electrónicos de la red eléctrica.
– Los programas Eco reducen el consumo de energía.
Los programas ECO usan menos agua, lo que ahorra energía en comparación con otros programas. Por otro lado, asegúrate de que la lavadora haya alcanzado su capacidad máxima antes de ponerla en marcha. Lo mismo ocurre con el lavavajillas, debe estar completamente cargado y se recomienda el programa Eco para ahorrar energía.
– Utilizar lámparas de bajo consumo
Confíe en las luces LED, pueden ahorrar hasta un 80% del consumo de electricidad de su hogar. La inversión inicial es mayor, pero se amortiza con la reducción del consumo energético, que se refleja en las facturas.
– Utilice un termostato para regular la temperatura en su hogar.
Se recomienda no aumentar la temperatura por encima de la indicada (entre 20 y 23 grados en invierno) para mantener el confort térmico y no aumentar el consumo energético. El uso de un termostato permite mantener el confort térmico ideal.
– Apagar las luces de los dormitorios.
Es necesario aprovechar al máximo la luz natural y apagar la luz en las estancias que no necesiten estar encendidas.
– Calefacción de gas natural.
El uso de gas natural para la calefacción supone una importante reducción de la factura, esta energía es más barata que la electricidad.
– Ventilar bien la casa.
Si la casa se ventila más tiempo del necesario, se puede perder el confort térmico conseguido. Airear una vez al día es suficiente.
– Uso de energías renovables.
Generar electricidad a partir de fuentes naturales como B. la instalación de placas solares, abarata la factura de la luz.
Ahorrar energía no solo reduce la factura de la luz, sino que también mitiga los efectos del cambio climático.